El control de contaminación de la ITV es distinto para los diésel que para los gasolina. Los vehículos de gasolina tienen que realizar la prueba de gases, en la que medimos el monóxido de carbono (también conocido como CO). Este gas es consecuencia del proceso de combustión, pero, en ocasiones, puede haber una mayor cantidad.
Por su parte, a los vehículos diésel se les hace la prueba de opacidad, para comprobar el nivel de humo que sale del tubo de escape.
¿Qué se mide en los vehículos gasolina en la prueba de gases de la ITV?
Esta prueba mide si la combinación de aire y gasolina es la correcta, ya que, de lo contrario habrá un exceso de CO, un gas muy tóxico, incoloro e inodoro, que solo puede detectarse con los equipos adecuados.
Para que las emisiones de los vehículos de gasolina sean adecuadas, es importante que el sistema de admisión y el catalizador, que es la pieza que tiene la misión de reducir las emisiones contaminantes de CO, funcionen correctamente.
Las consecuencias de emitir más CO de lo permitido son:
- Disminuye el rendimiento del motor.
- Se deteriora el catalizador del vehículo.
- Aumenta considerablemente el consumo de combustible.
¿Qué se mide en los vehículos diésel en la prueba de opacidad de la ITV?
Las consecuencias de que los valores de opacidad sean superiores a lo permitido son:
- Humos negros en la salida del escape y carbonilla tanto en los cilindros como en las válvulas, que deterioraran el catalizador.
- La acumulación de la carbonilla provoca que el motor tenga que esforzarse más para funcionar y eso tiene un impacto directo en tu economía, tanto porque se consume más como porque el vehículo se deteriora antes.
Has visto las consecuencias directas para tu vehículo en el caso de que contamine más de lo permitido, pero, evidentemente, eso también tiene efectos sobre el medio ambiente. ¿Cuáles?
- Se reduce la cantidad de oxígeno en la atmosfera y, por tanto, el aire que respiramos.
- Puede producirse lluvia ácida, es decir, lluvia con productos químicos tóxicos.
- Se acelera el efecto invernadero, que daña la capa de ozono, la que nos protege de los rayos ultravioletas del sol, y por el cual la Tierra está calentándose.
Así que, por tu bolsillo, tu seguridad y el medio ambiente, es importante que realices el mantenimiento adecuado a tu vehículo, el cual incluye pasar periódicamente la ITV, y que realices una conducción eficiente para contaminar lo menos posible.