La principal característica que diferencia una moto de un ciclomotor es la cilindrada y la velocidad alcanzada por estos vehículos. Mientras que el ciclomotor tiene un motor con una cilindrada inferior a 50cc que limita su velocidad a 45 kilómetros por hora, la cilindrada y velocidad de las motocicletas dependerá de su modelo y tamaño, pero siempre será superior a los 50cc y superará los 45 km/h.
Precisamente por ello, la edad y el tipo de carnet necesario para conducir una moto o un ciclomotor son distintos y, como decíamos, el tipo de vías por las que pueden circular. Sin embargo, para conducir ambos vehículos es necesario tener un seguro y pasar la Inspección Técnica de Vehículos.
A pesar de que los puntos de inspección que se revisan en la ITV de los ciclomotores y en la ITV de las motos son muy parecidos, como vehículos distintos que son, también existen diferencias en los puntos de inspección. La más destacada es la que hace referencia a su principal diferencia, que es la prueba de limitación de velocidad a la que son sometidos los ciclomotores. Esta prueba comprueba que el ciclomotor no sobrepase los 45km/h, una de las principales razones por las que muchos ciclomotores no superan la ITV de manera favorable.
En relación a este punto, algunas personas, modifican las características de su ciclomotor para conseguir aumentar la potencia y superar el límite de velocidad que estos vehículos tienen de serie, mediante cambios en el tubo de escape, en el sistema de alimentación y en el sistema de transmisión. ¿Cuáles son las consecuencias? Más allá de que sea una práctica ilegal, se provocan unas características nuevas al ciclomotor, que vulneran las condiciones de seguridad y medio ambientales originales del vehículo. Ya que, por ejemplo, si la velocidad máxima es superior, no se garantizan las condiciones de frenada óptimas por el fabricante. Y, desde la ITV, nuestro compromiso es precisamente dar las máximas garantías en cuanto a seguridad vial y preservación del medio ambiente.
Por eso queremos promover la consciencia de no modificar ilegalmente un ciclomotor, ya que eso puede ser un peligro para ti y los demás conductores. De hecho, desde que en 2007 la ITV para ciclomotores empezó a ser obligatoria, se ha reducido en un 80% la tasa de accidentes mortales con este tipo de vehículos. Así que, si quieres un vehículo de dos ruedas que corra más, opta por una moto en lugar de un ciclomotor.